Enrique Viana. Tenor.

Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.Música y excusas. Enrique Viana.

MÚSICA Y EXCUSAS

De humanos animales y animales humanos…

El tiempo ha dicho que los humanos para vivir necesitan encontrar un sentido a sus vidas, mirar alrededor e intentar reconocerse, quizás esto no sea mas que una excusa. Ellos observan a sus semejantes pero aún no conocen los espejos…

Luego hay otros seres que también están aquí y que respiran, se mueven, corren etc… son los animales, y aún otros que respiran y crecen aunque no corran- de momento- son las plantas.

Estos dos grupos últimos nos abandonan poco a poco y a gran velocidad se convierten en “nada”. Una “nada” que castiga nuestro alrededor y convierte en “nada” el espacio entre dos humanos.

Hombres, animales y plantas coinciden en el planeta – que no es poca cosa a la hora de coincidir-.

A veces los humanos tienen que elegir compañeros y no siempre lo tienen fácil entre sus iguales. ¿Solos? , ¿Más solos? ¿Absolutamente solos?...

Mis amigos me dijeron que estaba todo claro en esta función que van a ver y oír hoy, y mis enemigos, que tenía que explicarlo porque no tenían nada claro que función tenía esta función. Los amigos se sabe que son pocos y los enemigos no revelan su número con facilidad pero el ruído que hacen es incómodo para vivir… eso teniendo en cuenta que nunca hay amigo demasiado grande ni enemigo demasiado pequeño. Y que el hombre hizo del ruido la música y hay una esperanza de que no haga de la música el ruído.

Por si amigos y enemigos tienen razón- a veces se coincide en algo mas que en el planeta- yo no les explico nada y les advierto todo. Esta función no es mas que un toque de atención, y su función es llamar su atención si ponen atención… esto es lo único claro que les quedará de ella- de la función-. Acepten mis excusas…

Bueno... También está la música que nos dejaron los hombres de otros tiempos, “las campanas de corneville” hablan de tormentas, tsunamis y naufragios varios, una “mascota” nos llega del cielo para calmar nuestras soledades, y “el exiliado” añora los colores de su tierra. Del paraíso perdido habla “la africana” y la información de la bolsa europea ya es “la diva del imperio”, mientras tanto una “viejecita” se atusa en el espejo para asistir a “la muerte del cisne”, y un joven “werther” quiere dormir toda la primavera.

Bienvenidos a un drama-cómico.

Dos recomendaciones por si hubiese efectos secundarios que se traducen en alteraciones del sueño, preguntas sin respuesta, erupciones neuronales etc…

1ª estén atentos, o sea … escuchen.

2ª disfruten, o sea piensen.


CRÍTICAS

Música y excusas, su tercer espectáculo propio, es decir, concebido, escrito y zurcido -es autor del vestuario y de la escenografía también- por él, tiene, según Viana, los mismos ingredientes de su estilo: gracia, mala leche y amor por la ópera a partes iguales. “Contiene los tres tipos de humor que me gustan, la parodia de uno mismo, el surrealismo y el absurdo”, confiesa.

(J. Ruiz Mantilla, El País)

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